quebradas
QUEBRANTOS
Y OVACIÓN
…y
yo he visto al oro tierno
barbullendo
en la redoma
José
Martí.
Yo
pido por la paz una paloma,
que
se junten los clavos y la risa,
que
el hombre me dedique una sonrisa
y
que duerman las flechas tras la loma.
Que
no despierte en sí la antigua Roma,
que
el odio no sea el germen que ahora avisa,
que
la guerra no encuentre nueva visa
cuando
el oro barbulle en la redoma.
La
paz como una luz baje del cielo
y
se ilumine el astro en nueva unción
para
curar quebrantos del pañuelo.
Que
un gobernante cese la punción
más
allá de la rabia y el desvelo
para
darle a su vida la ovación.
24-10-2011.